Todos estamos etiquetados pensando que las empresas privadas son las únicas o las más adecuadas entidades encargadas de generar beneficios para la sociedad, sin embargo, un actor determinante en la sociedad es el mismo Estado.
Cuando algún incidente sucede en alguna región del país, peor aún si es en un sector donde la minería prolifera, todos miran a la empresa que está ocupando espacio y recursos en esa área. No se ponen a pensar que una responsabilidad directa e íntima es generada entre el Gobierno de turno y esa región que valga la redundancia, gobierna.
No solo las empresas están llamadas a actuar responsablemente con la sociedad sino también las mismas entidades públicas que tienen, no la exhortación sino más bien la obligación de mejorar sus servicios, sus procesos, su logística.
Por ello, hago un llamado al Estado, las municipalidades, los gobiernos regionales, las universidades públicas, las ONG´s ha que participen sincera y transparentemente de esta positiva tendencia de concientización para realizar nuestras funciones de una mejor manera.
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