Una mirada a Africa


El continente olvidado, África

África es un continente olvidado. Y esto no significa necesariamente que no se hable sobre él, puesto que los medios de comunicación sí que se hacen eco de sus continuas desgracias. Pero no es suficiente una noticia semanal para tal magnitud de injusticias, sobre todo cuando es el comportamiento de los países en los que vivimos un factor más responsable de la postración africana.
Y es que, a pesar de su riqueza, África no logra salir de una continua crisis. Sus problemas no tienen una solución cercana, porque vienen arrastrándose desde los tiempos de la colonización, cuando los países occidentales configuraron una economía hecha a la medida de sus necesidades, de la que no es fácil salir.
Los datos que describen la situación de la sanidad africana son alarmantes. En muchos países el gasto en educación o sanidad es mucho menor que el presupuesto dedicado a las armas. La sanidad suele llevarse entre el 5 y el 10% de los presupuestos generales. Aproximadamente, unos 4 euros por habitante y año. Enfermedades curables en Occidente son las responsables de la muerte de 12.000 personas al día en África. Además, está la malaria, que padecen 27 millones de personas, la tuberculosis, las infecciones intestinales, etc. y combatirlas no resulta rentable. Fármacos como la eflornitina, por ejemplo, indicados para combatir la enfermedad del sueño, ha dejado de fabricarse porque no dan dinero. Y hay un tráfico inhumano de medicamentos falsos o caducados. Es patético constatar que las enfermedades de los pobres perduran y matan porque no son rentables. Otro dato: de los 1.223 fármacos nuevos desarrollados entre 1975 y 1997, sólo 13 (el 1%) fueron destinados al tratamiento de males tropicales, nueve de ellos para el mercado veterinario. La malaria continúa causando al menos dos millones de muertos porque los laboratorios se resisten a investigar para producir una vacuna.

Es importante resaltar la epidemia de los últimos años: el sida. En Europa Occidental hay 500.000 personas infectadas; en América del Norte, 900.000; en Caribe, 400.000; en Iberoamérica, 1.500.000 infectados; en Australia y Nueva Zelanda, 15.000; en Asia del Sur, 6.500.000; en Asia Oriental y Pacífico, 1.000.000; en Europa Oriental y Asia Central, 1.000.000; en África del Norte y Oriente Medio, 400.000. Bien, pues en el África subsahariana hay 28.000.000 infectados. Viendo las cifras del resto del mundo es fácil hacerse a la idea de la desigualdad. En total, el 80% de los infectados por el virus del sida están en África, donde sólo vive el 10% de la población mundial.

No se puede decir que no se está generando ayuda alrededor de esta crisis, el problema fundamental es que no es suficiente. Es necesaria una difusión mucho más agresiva y masiva por parte de los medios que llegue a todo continente. Se necesitan acuerdos intercontinentales que permitan armar proyectos que realmente generen impacto en la población africana. La idea de un acuerdo u organización, como USAID, es considerable. Además de esto es necesario pensar que el desarrollo esperado y sus reflejos serán apreciados en un par de décadas.